La belleza de las cosas está en saber disfrutarlas sin
necesidad de poseerlas del todo...vive la magia de cada cosa en cada instante...
Para el proceso de toma de consciencia, transformación,
sanación y logro.
debemos prestar especial atención a los estados emocionales e intervinir con precisión sobre ellos.
debemos prestar especial atención a los estados emocionales e intervinir con precisión sobre ellos.
El biólogo Humberto Maturana, muestra que las emociones son
disposiciones para la acción, vale decir que nuestras posibilidades de
hacer en cada momento, están limitadas por el estado emocional y
anímico en el cual nos encontremos. Por ejemplo, si estoy enojado,
difícilmente me surja abrazar o decir cosas amables, es probable que me
incline hacia alguna forma de violencia y quiera tener razón; si me doy
cuenta que evito experiencias que deseo tener, es probable que este
asustado; y si estoy triste lo más probable es que tienda a la
inacción; por el contrario si estoy contento y alegre probablemente
tendré ganas de compartir e interactuar y si me siento agradecido
estaré dispuesto a dar. Este mecanismo es absolutamente natural y forma
parte de nuestro “equipo de supervivencia” como lo describe Daniel
Golemann, en su célebre “La Inteligencia Emocional”. Las emociones que
nos acaecen son “disparadas” casi de forma inconsciente y muchas veces
las habitamos sin darnos cuenta. De tal manera, podría decirse que, en
lugar de tener emociones, estas nos tienen a nosotros. Entonces, de
acuerdo al estado emocional en que me encuentre me serán posibles
ciertas acciones y no otras.
El trabajo sobre si mismo desde esta perspectiva ayuda a capacitarse para auto observarse y descubrir el propio estado emocional y anímico desde el cual estamos actuando. Lejos de pretender reprimirnos en nuestra emocionalidad o insensibilizarnos, la propuesta apunta a comprender las emociones e interpretarlas como “mensajeros” que muestran una oportunidad de aprendizaje.
De esta forma la idea es reconocer como estamos, integrar la emocionalidad dándole un sentido, tomando el aprendizaje y capitalizandola para diseñar hacia donde quiero ir ya sea en el terreno personal o profesional.
El trabajo sobre si mismo desde esta perspectiva ayuda a capacitarse para auto observarse y descubrir el propio estado emocional y anímico desde el cual estamos actuando. Lejos de pretender reprimirnos en nuestra emocionalidad o insensibilizarnos, la propuesta apunta a comprender las emociones e interpretarlas como “mensajeros” que muestran una oportunidad de aprendizaje.
De esta forma la idea es reconocer como estamos, integrar la emocionalidad dándole un sentido, tomando el aprendizaje y capitalizandola para diseñar hacia donde quiero ir ya sea en el terreno personal o profesional.
1 comentario:
Creo que hay que ser consciente de nuestras estados de ánimo, de nuestras emociones, pero no reprimirlas. A veces creo que es difícil saber el origen y no hay que darle demasiadas vueltas.
Besos de atardecer.
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