Limites de tu amor y Amor sin límites
...Cuando la gente te muestra sus limites (“No puedo hacer esto por ti”), te sientes rechazado. No aceptas el hecho de que los demás no puedan hacer por ti todo lo que esperas de ellos. Deseas un amor sin límites, un cuidado sin limites, una entrega sin limites.
Parte de tu lucha es fijar los límites de tu propio amor; algo que nunca has hecho. Das lo que la gente te pide, y cuando piden mas, das mas, hasta que te sientes exhausto, usado y manipulado. Solo cuando puedas fijar tus propios límites, podras reconocer, respetar y hasta estar agradecido a los límites de
los demás.
En presencia de las personas que amas, tus necesidades aumentan y aumentan, hasta que ellas se sienten tan agobiadas por tus necesidades que practicamente estan obligadas a dejarte para sobrevivir.
La gran tarea es reclamarte a ti mismo para ti, de manera de poder contener tus necesidades dentro de los límite de tu propio ser y controlarlas en presencia de aquellos a quienes amas. La verdadera reciprocidad en el amor necesita de personas que se controlen y que se puedan entregar al otro sin dejar de seguir aferradas a sus propias identidades. Entonces, para entregarte mas efectivamente y también para contener mas las propias necesidades, debes aprender a fijar límites a tu verdadero amor.
Tu amor, en cuanto deriva de Dios, es permanente. Puedes reclamar la permanencia de tu amor como un regalo de Dios. Y puedes darles a otros ese amor permanente. Cuando los demás dejan de amarte, tu no tienes que dejar de amarlos. En un nivel humano, los cambios pueden ser necesarios pero, a
nivel de lo divino, puedes seguir siendo fiel a tu amor.
Un dia serás libre de dar amor gratuito, un amor que no pide nada a cambio. Un dia incluso seras libre de recibir amor gratuito. A menudo se te ofrece amor, pero no lo reconoces. Lo descartas porque estas acostumbrado a recibirlo de la misma persona a quien se lo dabas.
La gran paradoja del amor es que, precisamente cuando te has proclamado como hijo amado de Dios, has fijado los límites de tu amor y así has contenido tus necesidades, comienzas a crecer en la libertad de dar en forma gratuita.
Se te convoca a vivir en un nuevo lugar, mas alla de tus emociones, pasiones y sentimientos.
Debes confiar en que hay otro lugar(...) donde puedes estar a salvo. Trata de pensar en este lugar como el centro de tu ser: tu corazón, donde todos los sentimientos humanos son en verdad mantenidos juntos. A partir de este lugar, puedes sentir, pensar y actuar en forma auténtica.
Es bastante comprensible que este lugar te de miedo. Tienes muy poco conocimiento de él. Has tenido vislumbres de él, incluso algunas veces has estado en él, pero la mayor parte de tu vida has habitado entre tus emociones, pasiones y sentimientos, y has buscado en ellos la paz interior y la dicha.
Además, no has reconocido plenamente este nuevo lugar como el lugar donde Dios habita y te sostiene. Temes que este lugar plenamente auténtico sea, de hecho, un pozo sin fondo en el que perderás todo lo que tienes y eres. No tengas miedo. Confia (...).
Podrias considerarlo el lugar de la unificación, en el cual puedes volverte uno. Justamente ahora, experimentas una dualidad interior: tus emociones, pasiones y sentimientos parecen separados de tu corazón. Las necesidades de tu cuerpo parecen separadas de tu ser mas profundo. Tus pensamientos y
sueños parecen separados de tus anhelos espirituales.
Estas llamado a la unidad. Esa es la buena nueva de la Encarnacion. La Palabra se vuelve carne y,así, se crea un nuevo lugar en que pueden habitar todo lo tuyo y todo lo de Dios. Cuando hayas encontrado esa unidad, seras verdaderamente libre...
Mantente atento.
Henri J. M. Nouwen
( Extracto del libro: "La voz Interior del Amor)
2 comentarios:
Buena reflexiòn.
La bùsqueda de la unidad.
Igual, no es fàcil.
Un abrazo.
Hola Gauchito...la unidad está dentro de uno, el amor está dentro de uno...
Gracias...
Un Abrazo!!
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