Conócete a ti mismo y aprende a escuchar
Saber escuchar la voz interior es la destreza máxima, ya que quien no sabe lo que quiere hace indiferente al camino que elija. El peligro es tratar de gustar perdiendo fidelidad con uno mismo. También hay que saber escuchar al otro, compartir y contagiarse con sus alegrías y procesar o contener sus angustias. Quien no escucha vende productos, quien sabe escuchar vende soluciones. Las mejores empresas son las que escuchan al cliente porque la información es el poder que permite transmitir el mensaje apropiado cuando nos llegue el turno de hacer uso de la palabra.
El aprendizaje de la escucha es progresivo: reproducir el contenido, poder repetirlo con otras palabras, descifrar las emociones, reunir todos los factores. El sonido más melodioso para el oído humano es el nombre propio. La clave es evitar el diálogo interno mientras el otro habla. Saber escuchar es el primer paso hacia la sabiduría que consiste en construír redes que estén disponibles antes de usarlas: redes de comunicación y redes de confianza.
Poner la oreja. La sensibilidad se acrecienta en estado de calma. La credibilidad crece al entregarse al otro para poder influir después, en lugar de dar consejos fuera de contexto. Saber escuchar exige dejar de juzgar, crear un espacio de silencio que conecte con el potencial para poder responder con responsabilidad sabiendo manejar las propias emociones . Se recuerda el 5% de lo que se escucha, el 25% de lo que se ve y el 90 % de lo que se hace. Por lo tanto, hay que escuchar activamente, con entusiasmo, haciendo de la escucha un acto. El gran maestro de la escucha fue Sócrates quien escuchando lograba un milagro: hacía parir ideas.
Saber escuchar es conocer tanto al interlocutor como para decirle: "Lo que tú eres resuena tan fuerte en mis oídos que no puedo escuchar lo que me dices".
Dr. Horacio Krell
3 comentarios:
Que acertado lo de "La sensibilidad se acrecienta con la calma".
Buen texto.
Un abrazo.
Un placer leer textos que enseñan de esta manera... natural, dulce... reales.
Un abrazo Graciela.
Hola Gaucho, de nada nos sirve tratar de calmar y ayudar a los demas si no hay amor dentro nuestro. en los estados de calma interior todo el amor divino se acrecienta dentro nuestro...
Hola Ernesto! que bueno que estés por acá. Los textos son interesantes, ciertos o no de acuerdo a como lo sienta cada uno. Me alegro que te haya gustado.
Les dejo un gran Abrazo!
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