Quien dirige nuestra percepción?

 Alma como espacio de información

No solo tenemos una mente personal, sino que participamos de una mente grupal, de un campo de consciencia grupal, de un espacio de resonancias donde estamos interconectados.

Todos hemos visto esas bandadas de pájaros en las que , de repente, el grupo gira en la misma dirección, y a continuación, sincrónicamente, vira a otra.  Y casi todos nos hemos preguntado: ¿cómo lo hacen?, ¿ quién o qué o cómo se transmite la información?

La respuesta escapa a la comprensión racional común, organizada según un modelo de causa-efecto, de estímulo-respuesta, de orden-obediencia.  También se zafa de la noción general del tiempo como algo secuencial, que camina de atrás hacia adelante, y de la visión de las relaciones interpersonales como meros vectores de comunicación e información lineales.

Aunque no tengo la respuesta, me atevería a proporcionar una hipótesis un poco audaz: esa información, la que hace que todos los pájaros giren al unísono, se encuentra en un campo, flotando en su atmósfera de alguna manera, y carece de tiempos pasados y futuros porque los engloba a todos en el momento presente.  Este campo reúne toda la información sobre que debe hacer el grupo y cada uno de sus miembros a cada momento.

En general, este campo grupal o sistémico se rige por la presión de lo acostumbrado, de las formas de vida conocidas.  Dispone de una conciencia de lealtad a lo anterior.  Apunta hacia el futuro las flechas del pasado, como intento de repetición de lo anterior y lo esperable.

Por suerte algunas flechas tuercen su destino y aciertan en nuevas formas de vida, es decir, acaban siendo generativas.  En el campo, cada presente contiene todo el pasado, despegándose en el futuro en una infatigable noria que trata de repetirse en sus semejanzas, pero que se equivoca de vez en cuando.  A esos errores afortunados contribuye sin duda la APERTURA DE CORAZON Y DE CONSCIENCIA de las personas.

Rupert Sheldrake, biólogo, filósofo y autor británico, lo explica con su concepto de los campos morfogenéticos, afirmando que la memoria y la información se encuentran en el campo y no en los individuos.

Cada campo genera una forma de vida que tienden a repetirse una y otra vez por la presión de lo anterior para que lo actual se le asemeje.

Esta es la razón por la que a veces es tan difícil conseguir cambios en las personas o grupos:  VIVEN LA PRESIÓN DE LA TRADICION con una fuerza que va mas allá de lo inconsciente y que parece insertada en lo biológico.

Por eso, ciertas soluciones a problemas que se repiten en los sistemas o en las personas hay que buscarlas en la apertura a lo CREATIVO y nuevo.

Las personas y las culturas se enriquecen al rozarse con lo diferente, crecen y desarrollan flexibilidad, apertura y tolerancia. Lo diferente, lo ajeno, nos procura crecimiento cuando es incorporado.

Se ha hecho célebre el llamado "efecto mariposa" formulado por el metereologo Lorenz donde: " si una mariposa agita hoy con su aleteo el aire de Pekín puede modificar los sistemas climáticos de Nueva Yorkel mes que viene", es su frase mas conocidaque alude con claridad a la conexión e interdependencia en esta inmersa red en que se despliega la vida.  Igualmente, los investigadores de la nueva física han acuñado el término "entonglamiento" para referirse a la peculiar y misteriosa conexión entre dos partículas atómicas, de manera que si alguna vez han estado en contacto quedan afectadas mutuamnente y para siempre en su destino e información aunque se encuentren en extremos opuestos de la galaxia. Quedan vinculadas de tal manera que si una de ellas recibe un impacto informativo o experimenta un cambio, éste es experimentado por la otra partícula al mismo tiempo.

No cuesta inferir la idea de una realidad subatómica que contiene circutitos de realidad y de comprensión que desbordan la lógica racional fundada en la apreciación simple de los sentidos. Esa lógica que nos dicta que la información se transmite por procedimientos verbales o no verbales, o sea corporales. ¿Y si no fuera unicamente así? ¿Y si la información estuviera en todas partes?  ¿ Y si solo necesitáramos felxibilizar nuestras ideas sobre la percepción para sintonizarnos con un mundo mas rico y vasto?...¿ No será acaso invisible lo que dirige nuestra percepción? ¿ No será invisible aquello que escribe el texto de lo que podemos ver?

Extracto del libro: "Vivir en el alma" de  Joan Garriga Bacardí

Licenciado en Psicología-formación en gestáltica-

Constelaciones Familiares y PNL.